Reparación de Coches

En este post vamos hablar de la reparación de coches en distintos talleres, porque es un tema que está muy candente ya que cada año que pasa nuestro parque móvil es cada vez más antiguo y por lo tanto hay más reparaciones necesarias y tenemos que tener claro a que taller llevar nuestro vehículo porque cada vez nos gastamos más dinero en un vehículo que año tras año es más viejo y por lo tanto más mantenimiento y más reparaciones cuando nos queremos dar cuenta podemos estar pagando más dinero por nuestro vehículo viejo que por la compra de uno nuevo.

Reparación de coches, te contamos la mejor fórmula para tu vehículo

Te mentiría si te dijese que hay una formula exacta para saber en qué momento debemos cambiar de coche, porque el que tenemos está perdiendo demasiado dinero y por lo tanto debemos empezar a pensar en invertir en uno nuevo y dejar de reparar el coche viejo, pero si, no hay ninguna fórmula, realmente eres tú mismo quien se tiene que dar cuenta. Está claro que una formula muy aproximada es valorar el vehículo viejo, no vale el valor emocional, sino el material, vamos como si lo tasásemos porque lo vamos a vender, en ese momento es fácil saber que si te encuentras con una reparación que vale más dinero que el que te darían por tu viejo coche tíralo y cómprate uno, ese sería un plan, otro seria arreglarlo y ganarle unos años más al vehículo porque con las piezas nuevas pues dejara de darte tantos problemas.

Pero luego en la práctica no esta tan claro, por ejemplo, yo aún tengo un coche comprado en el 97, si, tiene muchos años, pero la verdad es que todavía funciona bien y no está causando muchos problemas, tal vez sea porque nunca se le ha dado un uso intenso, pero tengo claro que cuando se estropee la unidad de encendido o algo que realmente cuesta entre 2 y 3 mil euros, ese coche se ira al desguace, pero mientras no pase eso, pues a mantenerlo así me está dando el servicio correcto.

Reparación de coches, ¿Sabes cuándo cambiar de coche?

Diríamos que es la pregunta del millón, más que nada si no te sobra el dinero, por lo tanto le pegaras vueltas y más vueltas, hasta que lo tengas claro. También tenemos que tener claro el uso que le vayamos a dar, porque no es lo mismo si necesitamos el coche para nuestro trabajo del día a día, como que solo lo necesitemos para el ocio, yo te recomiendo que el coche que sea para trabajar, no dejar que se haga más de 6 o 7 años viejo, así podrás venderlo de segunda mano sin que llegue a perder todo su valor con el dinero que nos den por él, poder ofrecer la entrada de uno nuevo o simplemente tirar de renting que hoy en día está muy interesante. Pero si tenemos un vehículo que solo lo cogemos algún que otro rato los fines de semana y no le damos un uso continuo, pues la verdad es que te puede durar perfectamente unos 20 años, seguro que no le pasa nada grave, por lo menos no debiera de pasarle, pero eso sí, prepárate para darle el mantenimiento correcto y eso seguro que te cuesta una pasta, relacionado con los kilómetros que le puedas hacer, porque hay muchas partes del mantenimiento de un coche que no dependen solo de los kilómetros sino también dependen del tiempo, por ejemplo, tenemos dos coches el coche “A” solo lo usamos en contadas ocasiones y luego tenemos el coche “B” que le hacemos muchos kilómetros, nos encontraremos que los neumáticos hay que cambiarlos a los 50.000 kilómetros o a los cuatro años, porque la goma de los mismos se seca y aunque no hayamos rodado con ellos se tiene que cambiar, por lo tanto el coche “A” se cambiaran los neumáticos cada cuatro años y pocos kilómetros y el coche “B” cada 50.000 kilómetros y no llegaran a los cuatro años… si sacamos el coste por kilómetro el coche “B” será infinitamente más rentable.

Y eso que solo hemos hablado de los neumáticos, pero con el aceite del motor pasa lo mismo y otras tantas partes que se pueden cambiar por uso o por tiempo. Siempre se dice que gastarse dinero en algo que se utiliza mucho no es caro, lo realmente caro es gastarse dinero en algo que apenas se utiliza.

Reparación de coches, la elección de taller

Lo normal es llevar el coche al taller cerca de casa, que suele ser un mecánico de confianza que tratara nuestro coche como si fuese suyo, pero claro puede ser que vivas en una urbanización o en un pueblo que pocos habitantes y que no haya taller, por lo tanto lo más sensato es manejarse por consejos o experiencias de vecinos, conocidos, familiares, etc. Y así terminar creando un vínculo entre tú y el mecánico de esa forma siempre podrás tener más confianza de forma mutua, porque ya sabes que dicen que los mecánicos pueden no ser de fiar y darte gato por libre, pero nunca tenemos que ser desconfiados, por eso lo mejor es seguir los comentarios de gente que ya ha utilizado los servicios de un mecánico y por lo tanto lleva varias reparaciones de coches y tiene claro lo que hay.

Luego también tienes los nuevos talleres rápidos, donde no hace falta pedir cita, te presentas y cogen tu coche con bastante rapidez, pero este tipo de talleres no suelen reparar averías, simplemente se encargaran del mantenimiento de tu vehículo y cambio de piezas de desgaste, como filtros, pastillas de freno, suspensiones, etc.

Reparación de coches, conclusiones finales

Bueno hemos llegado a la conclusión final que dependiendo del uso que le demos al vehículo determinaremos la vida del mismo y ello estará unido a las reparaciones que le podamos ejecutar al vehículo, teniendo en cuenta que las reparaciones no están unidas a los kilómetros que le podamos hacer, cuantos más kilómetros le hagamos necesitara más mantenimiento y tal vez más reparaciones pero la relación mantenimiento, reparaciones saldrá mucho mejor porque tendremos que dividir gasto del vehículo entre kilómetros realizados.

De tal manera un coche al que solo le hagamos 2.000 kilómetros al año, tendrá menos mantenimiento y menos reparaciones pero estas serán más caras en relación con el kilometraje que le hemos hecho, que otro coche que le hagamos 80.000 kilómetros al año, pero muchas veces nos dejamos llevar por el interés, por el que dirán, por la apariencia, antes que comprar aquello que realmente nos hace falta. Ahí lo dejo!